GLACIARES

GLACIARES

A la memoria de Fabio Anís Morel.
Militante de los hielos continentales.
Productor de la remota estepa.
Compañero de Utopías.

glaciares, saqueo, mineria a cielo abierto

Nuestras últimas fuentes expuestas al saqueo.

A muchos les podrá parecer un tema científico, o un recurso turístico de creciente interés internacional, pero la verdad es que mucha de nuestra riqueza está directamente relacionada al generoso recurso hídrico que proviene de ellos.


Existen grandes masas visibles de hielo continental, glaciares de roca sepultos en la cordillera como volcanes de hielo, napas congeladas y hasta faldeos enteros que trascurren alguna parte del año bajo un frío manto de nieve. Muchas de estas cristalinas fuentes son invisibles para nosotros, pero todas tienen en común la condición de ser garantía de nuestra agricultura y silvestre fundamento de nuestra rica flora y fauna nativa.

Gracias a su benéfica influencia, brotan manantiales a lo largo de toda nuestra geografía. Surgen de los puneños bofedales, donde pacen las vicuñas. Manan de los cuyanos chorrillos, donde corre cantora la acequia viñatera. O se derraman por los araucanos mallines, donde osa el jabalí. Y hasta brotan silenciosos allí, donde abreva con cautela el pudú, escondido como un newen por la selva valdiviana.

Contaminación y desinformación

En tanto podamos decir a modo de ejemplo que una provincia cualquiera de nuestro país que tenga parte de su territorio ocupado por la cordillera y que posea un promedio de tres cuencas hídricas, necesariamente contará con tres ríos, una docena de arroyos tributarios y un centenar de manantiales de montaña, cuya fuente será en definitiva el deshielo. Todos estos caudales son alternativamente alimentados por la precipitación, pero fundamentalmente lo que hará de estas fuentes un curso permanente de agua, es la presencia de una napa helada, o de un glaciar de roca, recónditamente guardado en el corazón de la montaña.

Cuando un gobernador habla de estar otorgando a la inversión extranjera más de doscientas concesiones mineras (Como en La Rioja, Chubut, San Juan, etc.), debemos caer en la cuenta de que se trata de poner en curso de explotación a la totalidad de los manantiales habidos en el territorio provincial bajo su cuidado. Y a la vez estar autorizando el uso de los arroyos como drenajes de procesos químicos reconocidamente tóxicos como en el caso de la lixiviación aurífera, entre muchos otros más que suponen la inhabilitación del agua efluente para el riego, aguadas, o para el irremplazable consumo del hombre de campo. De estos abusos, ni siquiera queda exenta la población silvestre que por alteración de la toponimia declina, se aleja, o directamente desaparece para siempre.

Esta verdadera traición a la representación política ha sido deliberadamente orquestada con la complicidad de nuestras fuentes de información cotidiana. Así junto al masivo envenenamiento rural (Endosulfán + Glifosato = Etnocidio Agrario), y al saqueo de todas nuestras reservas naturales, la actividad minera se sitúa con todos los honores en lo que ya podríamos denominar como el círculo áurico del saqueo y la contaminación argentina.

Arturo Avellaneda

permahabitante.blogspot.com

Comentarios

Silvia Ca ha dicho que…
Querido Arturo: me alegro que este post este dedicado al amigo Fabio.
te mando un abrazo y venite pa las casas!
besos